Desde la Corporación Chilena de la Madera, condenamos enérgicamente los recientes actos de violencia que acontecieron el fin de semana recién pasado.
Estos afectaron a una brigada vecinal que colaboraba activamente en la extinción de un incendio en la comuna de Collipulli, Región de La Araucanía, así como a otra brigada amenazada con escopetas mientras realizaba rondas preventivas en la comuna de Curanilahue, región del Biobío.
Consideramos inaceptable estos incidentes, ya que no solo pone en riesgo la integridad de las personas, sino que también debilita los esfuerzos conjuntos destinados a proteger nuestro entorno y comunidades.
Confiamos en que las autoridades identificarán a los responsables de estos cobardes actos de violencia y los llevarán ante la justicia. No debemos olvidar la trágica pérdida de 26 compatriotas el año pasado debido a los incendios. Esto subraya la importancia de controlar los incendios forestales lo más rápido y eficiente posible y así evitar que situaciones como las vividas se vuelvan a repetir.
