Delegaciones de brigadistas de empresas forestales y de Conaf participaron este viernes en el lanzamiento del Plan Nacional de Prevención y Combate de Incendios Forestales para la temporada 2020/2021, que encabezó el Presidente de la República en la Base Aérea El Bosque de la FACH en Santiago.
Con el lema “Chile Previene Incendios”, el presidente Sebastián Piñera anunció que se destinarán $60.738 millones al combate y prevención de incendios rurales, la mayor inversión pública en la historia para enfrentar estos siniestros y que comprende 52 aeronaves que, si las condiciones climáticas cambian o empeoran pueden ampliarse a 62; 2.957 brigadistas para combatir incendios, distribuidos entre todo el país; y 14 brigadas nocturnas, entre varios puntos.
El presidente de Corma, Juan José Ugarte, informó que las empresas forestales socias del gremio, proyectan una que permitirán financiar 55 aeronaves y más de 4 mil brigadistas, así como importantes acciones de prevención silvícola.
El dirigente gremial, valoró la participación del sector privado en la ceremonia, indicando que ella refleja el trabajo público-privado que lidera Conaf y donde participan Corma, Minagri, Onemi, FFAA y gobiernos regionales, “para enfrentar en la forma más eficiente y colaborativa el combate de estos siniestros”.
Juan José Ugarte también destacó el trabajo de los brigadistas forestales, especialmente en esta temporada con pandemia. “Dadas las condiciones climáticas que se avizoran, vamos a enfrentar situaciones desafiantes nunca vistas. Y por eso, su preparación profesional, compromiso y entrega con el país serán claves y en ellos confiamos para sacar esta gran tarea adelante”.
La actividad realizada en la base aérea contó con la presencia de los ministros del Interior, Víctor Pérez; de Agricultura, Antonio Walker y de Defensa, Mario Desbordes, el director ejecutivo de Conaf, Rodrigo Munita, y el director de Onemi, Ricardo Toro; y la gerente de Incendios de Conaf, Aída Baldini.
La Dirección Meteorológica de Chile anticipa una compleja temporada de incendios por un aumento de las temperaturas, un territorio con mucho combustible (vegetación seca), 10 años de sequía permanente y los incendios anteriores, que han generado un terreno propicio para nuevos siniestros.
Los incendios forestales son causados por las personas, ya sea por accidente o por intencionalidad. La intencionalidad durante el período pasado (2019-2020) llegó al 43%, provocando daños en el medio ambiente, a las actividades productivas y al desarrollo social. Las regiones que registraron los más altos índices de intencionalidad fueron: Biobío (68%), La Araucanía (55%) y Ñuble (51%).
